Los puntos críticos a la hora de llevar a cabo una reforma en
vehículos todoterreno son los soportes de los tirantes de los ejes o
la instalación de una nueva suspensión. Para que nada falle
debemos asegurarnos de que los puntos elegidos sean los
adecuados ya que el fabricante no prevé en el chasis los refuerzos
necesarios para otros anclajes que no sean los de origen. Podemos
encontrarnos que donde nos coincide una fijación tenemos un
espesor de chasis no apropiado. Para solucionarlo tendremos que
escoger la elección más favorable entre varias opciones: desde un
refuerzo desde puntos estructurales de mayor resistencia hasta un
subchasis de fijación.
La soldadura no es lo recomendable a la hora de hacer uniones
metálicas ya que produce un calentamiento excesivo de los
materiales pudiendo aparecer fisuras en los bordes de los cordones.
Además las soldaduras no permiten ningún grado de libertad
provocando fatigas en las uniones.
Con los movimientos de los ejes o elementos móviles debemos
tener cuidado ya que los esfuerzos en las articulaciones podrían
dañarlos. Esto se puede solucionar mediante un buen diseño
estructural o mediante la utilización de elementos como rótulas
uniball o slentblocks reforzados. Los tirantes y elementos oscilantes
deberán estar suficientemente dimensionados según los pesos del
vehículo y los esfuerzos a los que estará sometido. Otro de los
problemas que pueden surgir es que el nuevo peso supere los
límites máximos indicados.
El manual de reformas nos permite modificar la distancia entre ejes
manteniendo los originales. Podremos aumentarla o disminuirla
para mejorar ángulos de ataque, paso por curva o para una mayor
movilidad en zonas estrechas. Cumpliendo todos estos requisitos
los problemas en la legalización y en el posterior uso del vehículo
desaparecerán por completo.